No solo el área de mantenimiento sino que en cada parte de la estructura de una empresa debe existir un proceso rector que invite a revisar y a reflexionar sobre la validez de las interacciones funcionales que existen internamente permitiendo visualizar los ajustes necesarios para asegurar la continuidad de los procesos.

En anteriores newsletters mencionamos, desde distintas perspectivas, la importancia de contar con información precisa y confiable del proceso de deterioro de los activos para asegurar un proceso de decisión exitoso. ¿Cuáles son sus modos de falla?, ¿Cómo adquirimos y gestionamos la información sobre el estado actual de cada activo?, ¿Cómo es el proceso de análisis para determinar las acciones necesarias? Para que finalmente definamos ¿Cuál es la estrategia de intervención más adecuada? 

El equipo de mantenimiento que emprenda la tarea de responder las anteriores preguntas debe ordenar su trabajo de manera de lograr Procesos bien definidos y estandarizados, desarrollar integralmente a las Personas que forman parte del equipo, manteniéndolas motivadas y comprometidas, y contar con la Tecnología adecuada que permita habilitar nuevos campos de acción y potenciar los resultados. Ahora bien, es importante destacar que existe una relación óptima entre el formateo de las relaciones funcionales PPT (procesos, personas y tecnología) y el contexto de negocio que, una vez alcanzada, debe ser mantenida. El continuo cambio de las técnicas y la tecnología, como así también las exigencias del mercado, nos obligan a redefinir la forma en que desarrollamos las actividades para mantenernos competitivos.

En definitiva, la evolución del mantenimiento, es un proceso de aprendizaje que no es ajeno a nosotros, es un proceso que debe ser diseñado y gestionado conscientemente. Cómo el equipo de mantenimiento defina su estructura funcional determinará en gran medida su capacidad de adaptación y generación de conocimiento que le permita mantener estable el punto óptimo de acoplamiento tanto interno como externo.

ARES ARGENTINA SRL tiene más de 15 años de experiencia en la gestión del mantenimiento y acompaña a sus clientes en el camino de desarrollo de su mejor versión.

La pregunta no tiene una respuesta sencilla, la posibilidad de que el desarrollo tecnológico reemplace en algún momento la actividad humana es una debate que ha acompañado este proceso desde sus inicios y la discusión tiene varias dimensiones. Pero no es en esos términos que, desde ARES ARGENTINA, pensamos la respuesta. Más que poner en duda la necesidad de contar con un equipo de personas que desarrollen esta especialidad, que para nosotros es fundamental en las estructuras empresariales, lo que nos planteamos es qué procesos deben ser llevados a cabo dentro de una empresa para que el trabajo de mantenimiento pueda incorporar y explotar al máximo las herramientas que nos brinda la Industria 4.0.

Ejemplos actuales, como el desarrollo de Maninteart de la empresa mendocina IMPSA, muestran cómo es posible incorporar la tecnología más avanzada en la gestión del mantenimiento, en este caso, de centrales de generación de energía hidroeléctrica. Tal como se explicó en las Conferencias de Ingeniería y Tecnología Mendoza 2019 (CITM), evento que sirvió como presentación de esta plataforma desarrollada por el equipo de ingenieros de IMPSA, “Maintenart es una plataforma que integra la IA, el análisis de confiabilidad y la experiencia, con el objetivo de predecir indisponibilidades en los sistemas críticos de una central hidroeléctrica”.

En este enunciado se plasma claramente la idea de que el mero uso de la tecnología no asegura el éxito sino es alimentada con la experiencia del personal técnico de la disciplina correspondiente.

Este nuevo marco contextual que estas nuevas tecnologías han generado, que se encuentra en permanente evolución y con estribaciones aún inciertas, reviste tal importancia que ha merecido la calificación de revolución industrial. Las empresas, inmersas en este contexto, deben aprender a integrar estos cambios a su estructura para poder asegurar su subsistencia futura. Por tal motivo ARES ARGENTINA pone a disposición todo su conocimiento, experiencia y el acompañamiento consultivo que se requiere para que el proceso de Transformación digital logre el impacto esperado en los objetivos del negocio.

Las posibilidades de desarrollo del Mantenimiento son muchas, el contexto actual provee de oportunidades que están más cerca de la ciencia ficción que de la realidad técnica con la que convivimos a diario. Lo cierto es que el avance tecnológico puede tener un impacto significativo en la gestión del ciclo de vida de los activos, haciendo que el trabajo de mantenimiento tenga un impacto sine qua non en la cadena de valor de una empresa.

El área de mantenimiento dentro de una empresa gestiona 3 procesos principales:

1. el proceso de deterioro de los activos, 
2. el proceso gestión de la intervención planificada y 
3. el proceso de reparación.

El nivel de control que se tenga sobre estos procesos determina el éxito en la gestión del mantenimiento y en consecuencia en mayor o menor medida en los resultados del negocio.

De los tres procesos enunciados, el proceso de deterioro, es la llave para el resto. Independientemente de qué estrategia de mantenimiento sigamos, conocer a fondo los mecanismos de falla (modos de falla), el estado actual y las tendencias de las variables críticas de funcionamiento y la ontogenia de cada equipo, nos brinda una plataforma de datos que bien gestionados con las herramientas adecuadas,  pone a disposición del mantenedor la información correcta y en el momento correcto para que pueda tomar las decisiones adecuadas.

ARES ARGENTINA acompaña a sus clientes en el camino de la excelencia en la gestión del mantenimiento, diseñando los métodos adecuados y ajustados a las necesidades de cada proceso y empresa. Esto nos permite interpretar que no hay una sola forma de llevar adelante el mantenimiento, no obstante existen metodologías como el AMFE (Análisis de Modos de Falla y sus Efectos), el SMED y la gestión de subconjuntos y tecnologías modernas como las que ofrece la ciencia de datos que son aplicables a cualquier estrategia que se defina.