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Trabajo estandarizado, una de las más potentes herramientas del Lean Management

Esta herramienta busca reducir la variabilidad en un proceso, documentando y capacitando a los trabajadores sobre la mejor forma de llevar a cabo ese proceso para cumplir las exigencias requeridas por el mercado: calidad, seguridad, entrega y coste.

En las reuniones de diagnóstico de ARES es habitual que los empresarios o gerentes planteen el problema de que los procesos responden al ritmo de su supervisión, que los resultados son muy variables y que para lograr los objetivos deben estar pendientes de cada detalle. Esta situación también genera otros problemas como son la falta de tiempo para dedicarle a temas estratégicos, cansancio, frustración y desmotivación. Muchos de estos problemas se repiten también en los equipos operativos.
Este debe ser uno de los problemas que más comúnmente se encuentran en las empresas que consultan a ARES, sin distinción de tamaño o rubro, si es una empresa familiar o no, si es de servicios o de producto. Las causas potenciales que generan este problema son variadas y, si bien cada una requiere un tratamiento particular, el eje de la solución es la estandarización de los procesos.
El Trabajo estandarizado es una de las herramientas más potentes del Lean Management pero también es la menos utilizada, tal vez porque su implementación requiere una reflexión introspectiva sobre hábitos, costumbres y sobre la estructura de razonamiento con la que la empresa enfrenta sus problemas, es realmente un desafío al Statu quo, una invitación a salir de nuestro círculo de confort. Pero por las mismas razones se constituye como los cimientos para la mejora contínua.
El trabajo estandarizado ofrece muchos beneficios, se logra estabilidad en los procesos, previsibilidad y sustentabilidad en los resultados, facilita la detección de anomalías, la formación del personal y el proceso de aprendizaje organizacional. El método de implementación genera un círculo virtuoso, la definición de un estándar se convierte en la base para un nuevo proceso de análisis y mejora que llevará a un nuevo estándar mejor al anterior, el lograr un hábito de esta forma de trabajo promueve la creación de un cultura abierta al cambio que será fundamental para que las empresas logren sus objetivos más ambiciosos.

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